📘 Capítulo: Las petroleras extranjeras en Vaca Muerta

Chevron, ExxonMobil y Total: el poder energético transnacional en suelo argentino


1. Origen y consolidación del actor

Chevron (EE.UU.), ExxonMobil (EE.UU.) y TotalEnergies (Francia) son tres de las mayores corporaciones energéticas del mundo. Su presencia en Argentina, en especial desde la década de 2010, se concentra en la explotación de Vaca Muerta, una de las principales reservas de gas y petróleo no convencional del planeta.

Su llegada al país no fue casual ni neutra: se dio en un contexto de crisis energética y necesidad de divisas, lo cual les permitió negociar condiciones contractuales extremadamente favorables, muchas veces secretas, que les aseguraron rentabilidad asegurada, flexibilidad cambiaria y libre disponibilidad de utilidades.

El caso Chevron es paradigmático: el acuerdo con YPF fue sellado bajo cláusulas confidenciales, y su contenido solo se conoció parcialmente años después, tras una orden judicial.


2. Sectores donde operan

Estas empresas actúan directamente sobre el núcleo estratégico de la matriz energética argentina, con control y participación en:

  • Exploración y explotación de hidrocarburos no convencionales, especialmente shale gas y shale oil.

  • Infraestructura asociada: oleoductos, plantas de procesamiento, rutas de evacuación energética.

  • Tecnología extractiva: importan y controlan los métodos de fractura hidráulica (fracking), que no están desarrollados localmente.

  • Negociaciones contractuales y regulatorias: influyen sobre el diseño de políticas públicas en energía, tipo de cambio, subsidios y precios internos.


3. Métodos de extracción o concentración

Estas empresas utilizan mecanismos que combinan la lógica extractiva clásica con dispositivos financieros y regulatorios modernos:

  • Contratos bilaterales confidenciales: acceso a recursos públicos bajo condiciones opacas, muchas veces sin pasar por Congreso.

  • Esquemas fiscales especiales: estabilidad tributaria, beneficios aduaneros, devolución anticipada del IVA y acceso irrestricto a divisas.

  • Libre disponibilidad de utilidades: pueden girar dividendos al exterior sin restricciones, incluso en contextos de escasez de dólares.

  • Presión regulatoria y mediática: operan como lobbistas sobre gobiernos provinciales y nacionales para evitar controles ambientales o económicos.

En la práctica, convierten un recurso soberano en caja privada bajo protección legal, blindando su rentabilidad con respaldo diplomático de sus países de origen.


4. Vínculos políticos y redes de poder

Su poder no es solo económico: es geopolítico. Operan con respaldo directo de embajadas y gobiernos extranjeros. Entre sus vínculos:

  • Embajada de EE.UU. en Argentina: respaldo diplomático activo a Chevron y ExxonMobil.

  • Ministerio de Economía y Secretaría de Energía: influyen en diseño de subsidios, precios internos y acceso a divisas.

  • Gobiernos provinciales (especialmente Neuquén): dependencia fiscal de las regalías condiciona políticas locales.

  • Think tanks, consultoras y medios especializados: operan sentido común favorable al fracking y a la inversión extranjera “sin condiciones”.


5. Consecuencias para el país y la sociedad

  • Pérdida de soberanía sobre un recurso clave del siglo XXI (el gas de transición).

  • Captura de renta energética: la mayor parte del valor generado no se reinvierte localmente ni queda en manos estatales.

  • Contaminación ambiental: fracking intensivo, uso masivo de agua, sismos inducidos, sin regulaciones firmes ni estudios acumulativos.

  • Limitación de la transición energética: en vez de usar Vaca Muerta para financiar energías limpias, se profundiza la dependencia fósil.

  • Débil desarrollo de tecnología nacional: se importa equipamiento, saber y personal, sin transferencia real de conocimiento.


6. ¿Saben lo que hacen?

Sí. Estas corporaciones tienen trayectorias globales de décadas operando en países periféricos.
Saben cómo negociar condiciones favorables, presionar sobre gobiernos y garantizar su rentabilidad sin aportar desarrollo real.
Saben que sus operaciones pueden generar daño ambiental, dependencia tecnológica y fuga de divisas.
Y aun así lo hacen, porque su objetivo no es construir una Argentina sustentable, sino extraer valor mientras sea posible.


7. Conclusión: su rol en la continuidad del modelo

Chevron, Exxon y Total son la versión energética de la lógica histórica del saqueo argentino:
recurso nacional, riesgo local, renta privada, decisión extranjera.

Son parte de un modelo que convierte a la Argentina en territorio de sacrificio para abastecer de energía barata al mundo desarrollado, mientras aquí se mantiene la pobreza energética, el atraso tecnológico y la falta de planificación soberana.


🔁 Contracara: ¿Cómo sería este rol al servicio del desarrollo nacional?

Las petroleras extranjeras podrían operar bajo una lógica distinta si:

  • Se sometieran a contratos públicos, revisables y auditables por el Congreso.

  • Aceptaran sociedades mixtas donde el Estado retenga mayoría y dirección estratégica.

  • Pagaran impuestos reales y compartieran parte de la renta para el desarrollo de infraestructura federal.

  • Financiaren, por ley, fondos de transición energética y tecnologías limpias nacionales.

  • Cedieran participación accionaria y de gestión a universidades públicas y centros de investigación locales.

Una alianza justa y transparente podría convertir a Vaca Muerta en puente hacia una Argentina energética soberana, no en una cantera más del mundo rico.